El fotobordado ya es un arte que se ha extendido en el tiempo y en el mundo, ha alcanzado las universidades e incluso se hacen talleres de bordado y fotografía en los municipios, expresó Yara Legorreta Urbina durante su Charla Fotografía y Arte Textil, ofrecida a alumnos de la Facultad Popular de Bellas Artes (FPBA) el miércoles 13 de noviembre, en el Ex Convento de Tiripetío.

Yara Legorreta es egresada de la Licenciatura de Artes Visuales, de la FPBA, en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSMH), y comenzó explicando a los estudiantes que en la Facultad hay grabadores, pero hay técnicas que se exploran que no están consideradas en las Bellas Artes. Sin embargo, son importantes para comunicar como el fotobordado.

La conferencista hizo un recuento histórico desde el inicio del textil bordado en el Siglo III Antes de Cristo. Los primeros bordados se hicieron para cuidar, para proteger. Y puso de ejemplo las muñecas quitapesares, según cuenta la leyenda maya.

Otro ejemplo, el bordado con fines políticos, fue el que hacían en Chile los arpilleros, durante la dictadura del ex presidente Augusto Pinochet. El Arte Textil fue dedicado a cosas que no se permiten, pero comunican. Es decir, la puntada o el bordado pueden tener la pertinencia de generar grandes transformaciones, como las mujeres sufragistas encarceladas, quienes en 1912 cosieron una bandera. Lo importante es ver qué cosas contamos con el arte como el bordado y la fotografía, dijo la expositora, quien citó a uno de los artistas que dijo: “que nunca falten los hilos para bordar nuestros sueños, a través del fotobordado, con el cual se puede hacer crítica social y política”.

Yara Legorreta comentó que varios artistas ya han trabajado este arte del fotobordado con diversas técnicas de experimentación. Varios autores buscas fotografías antiguas y les hacen bordados, buscan comunicar algo. Fueron múltiples experimentaciones mostradas a los estudiantes, hechas por artistas.

Al final de la charla se registró un intercambio de opiniones de Yara Legorreta y los profesores Xaté Aguilar, Alma Hernández y Luis Alonso Hernández, con los estudiantes. Se dijo que el arte textil y la fotografía están muy en voga desde la Pandemia. Más que conocimientos es atrevernos a hacerlo.

Alma Hernández señaló que el bordado es una técnica contestataria. El bordar puede ser un paso para expresar, para comunicar algo.

Al final, la responsable del Ex Convento de Tiripetío, Elizabeth Moreno Carachure agradeció la asistencia de los treinta estudiantes y cuatro profesores de la Facultad Popular de Bellas Artes.